ESA MIRADA
Me estremece esa mirada de arcoíris apagado
entre nubes rojizas, de un cielo quebrado
Se ausenta de mi ego, la inusitada terquedad;
La absurda creencia,
de que solo lo que vimos fue verdad.
¿Y qué, de lo que sentimos?
Acaso, sin rozar la piel, ¿no llegaron otras manos?
¿Acaso el temblor febril, en una noche de Abril,
no le dio paso a la entrega,
a las mil y una caricias, que vadeaban
con un mismo fin?
¿Y qué, de lo que sentimos?
¿Acaso, no llegó la lengua muda,
a humedecer esos labios?
¿No dejó su huella el nacarado marfil?,
mordisqueando una boca
en aquella noche loca…, noche de Abril.
Me estremece esa mirada, que le ha puesto fin
a la infinitud de dos estrellas en cruzada
Se rindieron las armas y, en esa quietud
No habrá noches que embelesen su alborada
Ni melódicos gemidos
que musite aquél laúd.
¿Y qué, de lo que sentimos?
¿Acaso, no se fundieron, fuego y escarcha;
frio y calor que anhelantes se buscaban?
Risas en el corazón y dádivas sorpresivas
Que dejaron de atender otra razón.
La muerte en Soledad se llenó de vida
¿Y qué, de esa mirada…?,
Reflejada en el espejo, a plena luz.
Raquel Herrero
No hay comentarios:
Publicar un comentario